¿Que hacen los espíritus en la dimensión espiritual?

Pregunta:

¿Que hacen los espíritus en la dimensión espiritual?

Qué actividades hacen? o solamente vagan y vagan sin rumbo..
¿O están esperando a reencarnar?

Respuesta:

Esta es una pregunta difícil de responder, especialmente porque mientras estemos encarnados nuestra concepción del “qué hacer” está fuertemente condicionada por la experiencia material. Recuerda que como durante la encarnación no recordamos nada del pasado ni espiritual ni material si ya hemos encarnado antes.

Sin embargo de acuerdo con lo aprendido en la ECB, lo leído en algunos libros de Kardec e integrado dentro de La Teoría Espiritual, los espíritus realizan actividades propias de su condición. Por ejemplo, los espíritus en proceso de recuperación de su armonía (también llamados espíritus del bien) suelen dedicarse casi por entero a trabajar en tareas de ayuda a quienes aun están en el error.

Por su parte los espíritus que persisten en el error, suelen dedicarse a trabajar en unión con sus líderes y seguidores en la elaboración y ejecución de planes para aumentar su dominio y derrotar o destruir a sus rivales. Al tiempo que buscan la manera de evadir la acción persuasiva del bien en ellos y en sus seguidores.

El accionar de estos espíritus puede circunscribirse tanto a otros espíritus (que constituyen la gran mayoría de todo lo que existe) como a los espíritus encarnados y su ambiente físico. Pero recordemos que es aún muy poco lo que sabemos de la dimensión espiritual. Si el universo en que habitamos y que representa apenas si un punto perceptible para el espíritu se muestra vasto y complejo ante investigación científica, entonces la dimensión espiritual debe ser mucho más rica en opciones tanto de espacio como actividades por realizar.

El solo hecho de que exista tanta variedad de estados vibracionales posibles en la dimensión espiritual hace enormemente compleja la variedad de relaciones y acciones que se pueden realizar allí; haciendo de las posibles relaciones entre los espíritus una tarea que crece en una proporción que se agranda con la posible cantidad de espíritus y Partículas Espirituales (PEs) que la habiten.

Solo imaginemos la dimensión transicional. Esta es una dimensión constituida por todos los espíritus y PEs encarnadas más la enorme población de espíritus (enorme para nosotros) que se niegan a abandonarla y permanecen allí temporalmente. En esta dimensión prácticamente existe una copia espiritual (formada por las PEs encarnadas en cada estructura material) de todo lo que existe físicamente. Es decir que para los espíritus que allí están es como aun vivir en el universo físico. Pero si a esto le sumamos que es posible la existencia de otros universos paralelos al nuestro, entonces la vasta complejidad de estructuras y diseños, además de interacciones entre los espíritus y PEs, parece incalculable.

Sin embargo lo más difícil para nosotros es intentar imaginar que hacen los espíritus que nunca perdieron la armonía de sus atributos y aun habitan en la Dimensión Primaria. Cuando Kardec le preguntaba a los espíritus acerca de que hacían los espíritus si es que hacían algo del todo, ellos le respondían que siempre estaban ocupados en alguna labor porque la ociosidad eterna seria como un suplicio eterno. El espíritu siempre está haciendo algo opero entenderlo desde nuestra pobre concepción de la vida espiritual es difícil.

Yo a veces imagino a los espíritus mas armónicos con su gran inteligencia y sabiduría como grandes científicos, organizados en grupos de acuerdo a su interés, investigando y elucubrando acerca de nuevas ideas y nuevos descubrimientos de su intelecto respecto a ellos mismos y a El Creador. Buscando formas de corroborar sus hallazgos para luego presentárselo a otros y así lograr un consenso amplio. Y luego imagino a estos sabios yendo a otros grupos a ensenar lo aprendido y a su vez a aprender lo que otros han descubierto. Todo dentro de una organización perfecta donde al final, todos terminan por aprender todo lo aprendido y descubierto.

Recordemos que la evolución es una ley que constantemente nos empuja a avanzar, a progresar y en mi opinión esa progresión nos lleva hacia de lo individual a lo colectivo y de lo sencillo a lo complejo. Así que todas las sociedades de espíritus encarnados así como las sociedades de espíritus libres siempre estarán avanzando en este sentido hacia la constitución de colectividades cada vez más grandes de seres; creándose grupos cada vez más grande de seres inteligentes. Es como crear una inteligencia colectiva cada vez más grande donde la inteligencia individual no se pierde ni se diluye sino que enriquece a aquella.

Es tan incomprensiblemente enorme la realidad espiritual que la encarnación apenas si debe ser un paso anecdótico en la existencia de algunos muy pocos seres (pocos respecto a la totalidad de los que allí habitan), pero que sin embargo para quienes estamos aquí constituye una parte importante de nuestra realidad cotidiana.

Fraternalmente

Eduardo Sanz